Un millar de indignados frente al Congreso

La indignación del 15-M ha llegado hasta las puertas del Congreso.

La indignación del 15-M ha llegado hasta las puertas del Congreso canalizada a través del rechazo a la reforma de la negociación colectiva. Unas mil personas, según admite la Policía, están protestando en los aledaños de la Cámara Baja convocados a través de las redes sociales. «O pasamos o acampamos», amenazan los ‘indignados’ mientras unos 50 furgones policiales contienen su avance a sólo 20 metros del edificio.

La protesta nace de una convocatoria autorizada que derivó en una marcha hacia el Congreso

La calle del Congreso y otras colindantes están ahora mismo cortadas al tráfico. La Policía Nacional ha establecido una barrera -con varias filas de agentes- que impide el paso a los manifestantes mientras estos ya lanzan advertencias de quedarse. Se protesta contra la reforma de la negociación colectiva, cuyo proyecto está previsto que se apruebe el próximo viernes en el Consejo de Ministros, contra la reforma laboral y otras reivindicaciones ya conocidas del movimiento 15-M.

Alrededor de las 20.40 horas, se ha colocado la primera tienda de campaña al grito de «Eso, eso, eso, acampada en el Congreso». Ha sido un instante un poco tenso porque tras algunos empujones y caídas, los agentes se han colocado sus cascos en un ademán de cargar, aunque finalmente, la situación no ha ido a más.

Los ‘indignados’ no tienen prisa por abandonar la Carrera de San Jerónimo, donde permanecen de pie o sentados exhibiendo pancartas y coreando consignas y reclamando una asamblea en el Parlamento. «Estas con las llaves de mi padre», han gritado agitando sus llaveros.

[foto de la noticia]

Manolo, el octogenario líder

Entre ellos, también surgía la figura de Manolo, un octogenario erigido como líder improvisado de la concentración: «Os han llevado a una situacion sin salida, os animo a seguir, estáis cada vez más altos de cabeza y corazón», decía a la gente. Y la gente aclamaba al anciano al grito de «¡Presidente, presidente!» y «¡Ese hombre si nos representa!. «Estáis haciendo historia», asegura.

Unos minutos después, este hombre vuelve a tomar la palabra. Asegura que los dos partidos que nos gobiernan son «la descendencia de 1939 y que en España no hay más que extrema derecha e izquierda». Ademas,sin pelos en la lengua arremete contra la iglesia, a la que declara en un 90% culpable de esta situación.

El octogenario concluye: «El parlamento tiene que crear lo que la juventud lleva 40 años demandando». «¡Que se vayan a tomar por saco!», dice indignado. Los concentrados responden y aclaman al anciano: «No hay pan pa tanto chorizo» gritan.

La Policía espera

La Policía está, de momento, tranquila porque no hay atisbo de provocación y la protesta transcurre de forma pacífica. Hay quienes gritan a los agentes «Policía, únete». La incógnita a estas horas es sí la Policía actuará para desalojar la calle y restablecer el tráfico, aunque parece poco probable tras la experiencia del violento desalojo de los Mossos en Cataluña, cuyas críticas y consecuencias aún colean. La opción más probable es que aguanten hasta que, con el paso de las horas, la concentración se vaya dispersando.

Los policias piden relevos para ir a cenar porque los indignados no piensan moverse. Una portavoz con megáfono dice que hay poca comida y pide a los manifestantes que por favor que no abusen. «Los concentrados responden con ironia: «No abusamos, no somos politicos».

La protesta se ha originado al unirse en la plaza de Canalejas los manifestantes movilizados por la asamblea popular de Lavapiés con los presentes en la Puerta del Sol. Esta concentración -en una plaza a medio camino de Sol y el Congreso- había sido convocada y autorizada, sin embargo, ningún dispositivo policial estaba acotando el lugar para evitar una posible deriva en dirección al Congreso. Los agentes sí estaban apostados 50 metros más abajo, a unos escasos metros de una de las puertas.

Se les ha permitido acercarse tanto porque en este momento no se celebra pleno. De hecho, al inicio de la protesta el Congreso estaba casi vacío. De lo contrario, el perímetro tendría que haber sido mayor,informa Marisa Cruz.

Tras una pancarta principal con el lema ‘Pienso, luego resisto. www.tomalaplaza.net’ y otra de cabecera en la que se podía leer ‘Reforma laboral para los políticos’, centenares de personas han ido calle abajo hasta toparse con la Policía.

Los ‘indignados’ están coreando consignas de «Violencia es no llegar a fin de mes», «Reforma laboral, parada patronal» o «No falta dinero, sobran ladrones» y portando pancartas contra la negociación colectiva y con lemas como «Ley propatrón, explotador no», «Recortes a ricos primero», «Negociación imposición» o «Se alquila esclavo».

Los manifestantes han leído sus protestas por turnos y han hecho especial mención a la reforma de la negociación colectiva. También se ha leído la propuesta de la canciller alemana, Angela Merkel, para hacer más competitiva la Eurozona, que ha recibido el rechazo de todos los presentes al grito de «Nos importa un pepino».

Portavoces del movimiento han pedido por megáfono a los concentrados retomar la protesta de Sol y acudir a la asamblea general convocada para este miércoles en la céntrica plaza, algo que han declinado mayoritariamente los congregados frente al Congreso. Entretanto, Sol presenta una imagen de campamento fantasma en el que reina el silencio. Algunos acampados aseguran que a la asamblea que se ha celebrado esta tarde a las 20h ha acudido un reducido numero de personas.

Ningún diputado o responsable político ha acudido a hablar con los ‘indignados’ a pesar de que estos les exhortaban a ello con sus proclamas. ‘Rubalcaba, da la cara’, han dicho los congregados, que gritaban ‘Ahí está la cueva de Alí Babá’ mirando a la sede de la Cámara Baja.

 

 

vía Un millar de indignados frente al Congreso: O pasamos o acampamos | España | elmundo.es.

Absuelto por vender cartuchos para la Nintendo DS.

Absuelto por vender cartuchos para la Nintendo DS

El dueño de la tienda de informática Alechip de Avilés ha ganado el pulso a Nintendo en los juzgados. El magistrado del juzgado número 1 de Avilés ha absuelto a Alejandro Fernández, que había sido acusado por vender en su tienda cartuchos que modifican la consola Nintendo DS y permiten jugar con juegos ‘pirateados’ en la portátil. La acusación particular llegó a pedir para él 23 años de cárcel y estimaba sus pérdidas en 840.000 euros, mientras que el fiscal solicitaba año y medio de prisión.

En la sentencia, el juez no considera suficientemente explicado por parte de la compañía japonesa el mecanismo por el cual la consola reconoce un cartucho como ‘legal’.

De hecho, el magistrado echa en falta una explicación convincentesobre el contenido del ‘diálogo’ entre la consola y el cartucho para determinar si éste es ‘autorizado ‘ ‘no autorizado’, «y respecto de éstos se desconocen los comandos, archivos, datos, u otras aplicaciones informáticas de las que están provistos y por las que se puede utilizar la consola».

Es decir, no queda convencido por las explicaciones del perito contratado por Nintendo, quien según la sentencia «se limita a afirmar como dogma de fe de obligada creencia, sin exposición y explicación técnica alguna, la vulneración de las medidas de seguridad de la consola en cuestión».

Tampoco le convence al juez las explicaciones de perito de Nintendo sobre el uso de logotipo de la marca, por lo que apunta que «no se pretende que Nintendo revele más información de la imprescindible, pero sí al menos que se ofrezca un mínimo de información que permita su contraste por la otra parte y la debida ilustración al tribunal».

Para juegos ‘piratas’… o no

La sentencia descarta la comisión de un delito contra la propiedad intelectual y para justificar esta decisión destaca que los dispositivos carecen de ‘software’ y, por tanto, no contienen contenidos protegidos por la propiedad intelectual.

Asimismo, se remite a otra sentencia sobre ‘chips’ para consolas, de la Audiencia de Valencia, en la que se destaca que estos dispositivospueden servir «también para permitir la ejecución de juegos originales de otras zonas y para convertir la consola en un ordenador personal apto para realizar múltiples tareas absolutamente lícitas, como pueda ser el manejo de fotografías, ejecutar juegos de libre distribución no diseñados para consola, escuchar música, etc.»

Es más, el juez recuerda que la compatibilidad de usos (en este caso, de una consola de videojuegos que se pueda usar para otros fines) «no constituye una infracción a los derechos protegidos por la legislación sectorial privada», y afirma también que las normas europeas ordenan sancionar la venta o distribución de cualquier medio para suprimir o neutralizar las medidas de protección de un programa, pero sólo si el ánimo es exclusivamente suprimir dichas medidas.

Propiedad industrial

En cuanto a la violación de la propiedad industrial de Nintendo que alegaba la compañía, según la sentencia la ley prevé límites sobre la apariencia de un producto registrado, y por tanto el registro del diseño «no confiere derecho alguno sobre su apariencia» que deba ser copiada en forma y tamaño para que pueda ser conectada mecánicamente a otro producto. Es decir, copiar la forma de la clavija no es ilícito.

Pero el juez va más allá, y considera que el tipo de cartucho que Alejandro vendía en su tienda no es idéntico al original de Nintendo, dado que el primer lleva además una ranura para introducir una tarjeta Micro SD, entre otros elementos.

Personas, no empresas

En cuanto a la acusación de descubrimiento y revelación de secretos, el magistrado afirma que este tipo de delito protege derechos fundamentales como el de la intimidad, propia imagen e inviolabilidad del domicilio, pero no debe tutelar datos o informaciones empresariales, protegidos por el Derecho mercantil. Viene a decir que solo las personas físicas tienen intimidad como tal, no así las personas jurídicas.

Y en cualquier caso, recuerda el juez, como se desconoce el contenido informático de los cartuchos importados por el usuario «como reiteradamente se viene diciendo» en la resolución, el juez reitera que no puede saberse si albergan secretos o información reservada de Nintendo

vía Absuelto por vender cartuchos para la Nintendo DS en su tienda de informática en Avilés | Navegante | elmundo.es.

Siete jugadores rechazan los pagarés del club

 

 

Siete de los 25 jugadores de la actual plantilla del FC Cartagena no firmaron ayer el finiquito que le presentó la entidad, al no aceptar como fórmula de cobro los pagarés ofrecidos por el director general, Paco López.

Se trata de Cygan, Clavero, Longás, Iñaki Muñoz, Unai Expósito y Pablo Ruiz, seis jugadores cuya vinculación con la entidad acaba el próximo 30 de junio y no van a seguir en el equipo, y de Ander Lafuente, futbolista con contrato hasta junio de 2012 y con el que, en principio, el nuevo técnico Paco López cuenta para la próxima campaña.

Los siete futbolistas alegaron que, antes de aceptar los pagarés, tenían que consultar con sus propios abogados o con los del sindicato de futbolistas AFE.

Unos indicaron que responderían esta misma semana a la oferta del club y otros, como fue el caso de Cygan, derivaron el asunto directamente a su letrado. En el club sospechan que alguno de estos siete futbolistas presentarán una denuncia ante la AFE en los próximos días.

Se da la circuntancia de que seis de los siete jugadores que ayer rechazaron la fórmula de pago planteada por el presidente, Paco Gómez, estaban el pasado año en el club y el último verano todos aceptaron los pagarés como método para cobrar. Y acabaron cobrando.

Por cierto, el FC Cartagena ha mejorado este año su pauta para llevar a cabo los pagos pendientes y ha acortado los plazos, debido a la recomendación realizada hace poco por el gerente de AFE, Luis Gil, quien advirtió a los futbolistas de que lo mejor para ellos era rechazar pagarés cuya fecha de cobro superara el 31 de diciembre de este año.

En este sentido, lo que ayer ofreció el Cartagena a sus futbolistas fue pagar la nómima de mayo dentro de quince días -el próximo 25 de junio- y agrupar el resto de deudas pendientes (paga de junio, ficha y cláusulas) en dos plazos. El primer pagaré se haría efectivo en octubre (el 50%) y el segundo, en diciembre (el otro 50%). En los dos últimos años, la entidad albinegra fijó esos plazos en noviembre y febrero del año siguiente. En 2009 recibió cinco denuncias y en 2010, ninguna. En ambos casos, todos los futbolistas cobraron hasta el último céntimo de lo estipulado en sus contratos.

En la entidad albinegra destacan el hecho de que 18 jugadores, muchos de ellos sin ningún lazo a partir de ahora con el Cartagena, han valorado el esfuerzo de Paco Gómez por acometer los últimos pagos del año antes de que termine el 2011. Entre los que aceptaron ayer el ofrecimiento del club y firmaron el finiquito están siete hombres con contrato hasta 2012. Son Mariano Sánchez, Rebollo, Chus Herrero, Txiki, Toni Moral, Maldonado y Goiría. E hicieron lo mismo los cedidos Casilla, Rodri, Jordi Pablo, Botelho, Cala y José Carlos, así como Toché, que podría seguir, y el resto de los que se marchan del club, que son Víctor, Riga, Schmöller y Julien.

vía Siete jugadores rechazan los pagarés del club – Fútbol Club Cartagena.

Cuidado con la letra pequeña de las ofertas de la guerra del móvil.

Cuidado con la letra pequeña de las ofertas de la guerra del móvil.

 


Inés Abril – Madrid – 08/06/2011

¿Por qué las operadoras insisten tanto en la venta telefónica? Porque saben que funciona; porque son conscientes de que, por mucho que los clientes se quejen de la molestia de llamadas casi constantes a cualquier hora del día, la realidad es que se consiguen altas, que se logra que un abonado de una compañía rival se cambie o que el usuario propio aumente su factura con un nuevo producto.

Lo mismo sucede con la letra pequeña de las ofertas. ¿Qué sentido tiene que una compañía no diga toda la verdad a sus clientes y que se enfrente a un usuario insatisfecho cuando le toque pagar o sufrir lo que ha firmado sin saber? «Todas las ofertas tienen letra pequeña», reconoce una fuente de una operadora. Y es que al final, añade otra fuente del sector, las operadoras son empresas y tienen que cuadrar sus cuentas por mucho que parezca que están lanzadas a una guerra de precios sin cuartel.

Que haya letra pequeña no implica que la compañía mienta a sus clientes. La mayoría de las veces, las condiciones están incluidas en algún sitio de la publicidad, lo que pasa es que no se destacan y pueden pasar en muchos casos desapercibidas o no estar del todo claras.

Consumo mínimo y cuota

Por ejemplo, un aspecto que causa confusión es la combinación de cuota mensual y consumo mínimo. Es lo que sucede con la nueva tarifa de Movistar de llamadas a seis céntimos el minuto. La cuota mensual es de seis euros, con un consumo mínimo de nueve euros «en el que computa el valor de la cuota», dice el argumentario legal de la oferta. La buena noticia es que eso significa que las dos cifras no se suman. Es decir, el cliente no paga todos los meses seis euros de cuota y nueve de consumo. Sin embargo, tampoco quiere decir que la cuota se diluya en el consumo y pueda compensarse de esa forma. No. Los seis euros se pagan todos los meses al margen de cuánto se use el teléfono y luego quedan solo tres euros más de gasto hasta llegar al mínimo de nueve euros. Si un usuario consume realmente nueve euros de móvil, pagará 15 euros al mes.

Esta política es distinta a la que tienen otras operadoras, donde no hay cuota, sino solo consumo mínimo, así que todo el gasto mensual corresponde a uso de teléfono. Por ejemplo, todas las tarifas de MásmovilYoigo y la de cinco céntimos de Jazztel tienen consumo mínimo, pero en ningún caso tienen cuota.

En esta misma tarifa hay otras condiciones a tener en cuenta. En general, se trata de un precio al que pueden acceder todos los clientes, ya vengan de otro operador o sean de la casa. Sin embargo, en algunos casos hay cuotas de por medio.

Contratar la tarifa de seis céntimos por minuto es gratis para los clientes de otros operadores que hagan la portabilidad a Movistar y los que estén en esta compañía con prepago y pasen a contrato. Sin embargo, las nuevas altas que quieran tener esta tarifa tendrán que pagar una cuota de 21 euros (todos los precios están sin IVA) y los que ya sean clientes de Movistar de contrato tendrán que mirar sus condiciones, porque es posible que tengan vigente algún compromiso de permanencia cuya ruptura les ocasione un coste. Además, en Telefónica cambiar de plan tarifario no siempre es gratuito. Se pueden hacer dos al año sin coste y «todos los que impliquen el paso a un contrato de mayor nivel de cuota mensual o consumo mínimo», dice la compañía. Si no es así, hay que pagar seis euros.

No para todos los clientes

Otro aspecto que no siempre está claro es a quién benefician los nuevos lanzamientos. Y normalmente los clientes que ya estén con el operador en cuestión son los últimos de la lista. Eso pasa con la nueva tarifa de Orange de seis céntimos el minuto, la que lanzará el próximo lunes para contrarrestar a Movistar.

En el caso de la filial de France Télécom, esta tarifa está disponible para portabilidades y nuevas altas, pero, en principio, no para los propios clientes, aunque este punto puede revisarse. Además, lleva asociada seis meses de permanencia obligatoria.

Recarga mínima

En el caso de ofertas para clientes de tarjeta, el llamado prepago, un punto que no debe pasarse por alto es la exigencia de recargas mínimas y periódicas para acceder a alguna tarifa concreta.Así sucede con el precio de ocho céntimos por minuto de la tarifa XS 8 de Vodafone. El cliente tiene que realizar una recarga mínima de 10 euros para tener acceso a este precio, que le dura 30 días. Si vuelve a cargar ese importe tras ese plazo, se renueva la oferta. Si no, el precio por minuto sube a 15 céntimos.

Por ese mismo precio de ocho céntimos el minuto, Jazztel ofrece una tarifa a los usuarios de tarjeta que no tiene recarga mínima. Pero si el cliente quiere reducir el precio y pagar sólo cinco céntimos, entonces hay que recargar un mínimo de diez euros al mes.

Cuidado con los SMS

Normalmente, el reclamo de la publicidad suele ser el precio por minuto de las llamadas a móviles. Por eso, hay que comprobar cuánto se va a cobrar por los SMS. La nueva tarifa de Orange es meridiana en este punto: las llamadas son a seis céntimos y los mensajes a móviles, también. Por eso, quizá, el producto se llama Básico 6. Sin embargo, la Tarifa 6 de Movistar da nombre al precio de las llamadas, pero no al de los mensajes, que cuestan 15 céntimos.

Otro caso es el de Yoigo, donde la mayoría de los contratos llevan aparejados SMS a diez céntimos, aunque se pague cuatro céntimos por minuto de llamada.

Bajos precios a cambio de tarifas de datos

Otro reclamo muy usado por las operadoras es resaltar un precio por minuto muy bajo, pero que solo se consigue si se paga un extra por consumo de datos.

Navegación ilimitada. ¿Seguro?

Una de las letras pequeñas más tradicionales en el sector está detrás del asterisco que se pone cuando se anuncian tarifas planas de datos «ilimitadas», la llamada banda ancha móvil. Estos contratos son ilimitados, sí, pero sólo hasta que se llega a un límite, porque casi siempre lo hay. En la mayoría de los casos, lo máximo que se puede conseguir por el precio anunciado es descargar 500 MB, uno o dos gigas con banda ancha real, porque a partir de ahí la velocidad cae en picado.

vía Cuidado con la letra pequeña de las ofertas de la guerra del móvil en CincoDías.com.